¿Acaso eres de los que ven el tema de los costos bajos como el eje central de su operación? Este apartado es digno de miles de maestrías, tratados, hipótesis, etc. Es algo que cualquiera que quiera estar en el mundo de los negocios debe respetar y cuidar minuciosamente si se quiere ser competitivo.
Evidentemente los costos son cruciales en un negocio. Son la base para saber si va a ser rentable nuestra inversión. La mayoría de los contadores ven en el manejo de los costos toda una área de estudio y de oportunidad para el manejo de los impuestos, por ejemplo.
Es cierto que no es para menos; en los costos y en el manejo de ellos, es que podemos aventajar a nuestra competencia. Los costos fijos y variables van a darnos muchas veces la herramienta para que contablemente podamos ofrecer nuestro servicio a un precio atractivo.
¿Precio de venta razonable o costo bajo?
Aquí es a donde nos vamos perfilando al fondo de éste artículo. Si bien es cierto que no debemos descuidar el tema de costos, porque es muy importante; no todo son costos ni todos lo ven como el eje central en su negocio.
Me voy a explicar un poco. Sucede que existe una gran parte de empresarios que ven como tema primordial la calidad de sus productos y servicios dejando para segundo lugar los costos. Prefieren enfocar sus esfuerzos en encontrar quién pueda proveerlos de la materia prima, mano de obra, conocimientos o productos que estén a la altura del mercado al cual quieren impactar.
Es entonces que tenemos marcas premium o genéricas que destacan de entre la multitud por la calidad de lo que venden. Son bastantes y para muestra un puño de estas: Apple, Google, Rolex, Netflix, Samsung, Pandora, Adidas, Microsoft, Mercedes Benz, Porsche, Montblanc, en fin muuuchas más y del ramo que gusten.
¿Creen que los costos sean su eje central…?
¿O la calidad de sus proveedores y de su producto o servicio final?
Pues bien, muchas de estas empresas han comenzado desde abajo y han visto en la calidad su nicho de mercado. Por difícil que parezca estas empresas son líderes de ventas en sus segmentos y con precios altos, muy altos en algunos casos.
¿A qué nos lleva todo esto en la logística?
Siempre vamos a encontrar un transportista más económico, una comercializadora con tarifas más bajas, una agencia aduanal con mejor precio… pero no es ahí donde ganamos. El costo de no tener un buen equipo en nuestra cadena de suministro o de distribución puede llegar a ser muy alto; mucho más alto incluso de haber contratado a los proveedores más costosos.
Existen innumerables casos de empresas que han querido ahorrar inútilmente en su cadena logística y han perdido mucho dinero.
Conclusión.
No dejemos de lado el tema de costos; menos aún la calidad de proveedores y socios comerciales. Saber si son los adecuados, si tienen experiencia en el tipo de operación que requerimos es fundamental. Pedir referencias de las empresas con las que trabajan es una práctica sana. Hasta pronto.
Con una carrera comercial de más de 20 años, con experiencia en distribución y retail, emprendedor en las áreas de aparador o consumidor final. Estudios en la Universidad De las Américas de Puebla, así como en la International Chamber of Commerce en materia de contabilidad y comercio exterior.